
De cantante a escritora: Cazzu estrena su primer libro 'Perreo: Una revolución’ 2z83a
Julieta Emilia Cazzuchelli, conocida artísticamente como Cazzu, no solo ha conquistado escenarios con su voz, sino que ahora también se aventura en el universo literario. A sus 31 años, la artista argentina presentó su primer libro “Perreo: una revolución”, en el marco de la 49ª Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, uno de los eventos culturales más relevantes de América Latina. 3o1c1s
En esta obra, la “jefa del trap” reflexiona sobre el reguetón desde una perspectiva profundamente femenina y política, abordando el género no solo como ritmo musical, sino como símbolo de libertad y resistencia.
Durante la presentación en el auditorio del evento, Cazzu compartió con el público algunas de sus motivaciones personales para escribir el libro. En sus palabras, el perreo representa “algo mucho más allá de la música”, y lo define como una herramienta que incomoda, que rompe estructuras y que propone una nueva forma de ser mujer.
“El reguetón incomoda, despierta la cólera en los más conservadores porque propone otra mujer”, aseguró frente a una audiencia que la ovacionó por su honestidad, convicción y coherencia con su discurso feminista.
A lo largo de su carrera, Cazzu ha sido una voz que constantemente defiende los derechos humanos de las mujeres, se ha pronunciado abiertamente sobre el machismo estructural en la industria musical y ha abrazado públicamente causas sociales como la legalización del aborto.
Por eso, este libro no es solo un manifiesto personal, sino una obra que busca abrir camino a otras mujeres dentro de la música urbana. Ella misma lo define así: “Este libro cuenta, reivindica y reniega sobre la industria musical urbana, precisamente sobre la vida siendo mujer en la música o en cualquier ámbito aplicable”.
“Perreo: una revolución” es una dedicatoria en sí misma. Cazzu lo escribió para las mujeres que aman el reguetón, pero también para las que lo odian, para las que sueñan con ser cantantes, productoras o compositoras, para aquellas que han resistido el peso del sistema y siguen luchando por su lugar.
En ese sentido, el libro se convierte en una herramienta de diálogo entre generaciones, una especie de puente entre la artista y sus seguidoras, entre el perreo que se baila y el que se piensa.
Cazzu no negó que enfrentó inseguridades durante el proceso de escritura. En su cuenta de Instagram confesó que tardó más de cuatro años en decidirse a escribir, y que en varios momentos pensó que no tenía derecho a publicar un libro.
“Varias veces me encontré sintiéndome una estúpida por pensar que tengo derecho a escribir mi propio libro… después me acordé de que existen libros de mierda y se me pasó”, escribió por su cuenta de Instagram.
Cazzu demuestra que su arte va más allá de los escenarios. Esta nueva faceta como escritora no solo amplía su legado artístico, sino que también reafirma su compromiso con el feminismo y la transformación social.