Enviado de Trump a Caracas contó detalles del rescate de estadounidenses: Dos se negaron a salir porque pensaron que era "otro" engaño 6w3e1f
Volver a Caracas y rescatar a otros seis estadounidenses es el plan inmediato del enviado especial del presidente Donald Trump, Richard Grenell, luego negociar con el régimen de Nicolás Maduro y lograr el pasado 31 de enero la libertad de seis connacionales que permanecían arrestados en Venezuela. 4w6g6x
"Hay al menos seis (...) Y estamos trabajando en eso. Sin duda volveremos", dijo en una entrevista con Megyn Kelly, donde reveló detalles de cómo fue el viaje a Venezuela para negociar la excarcelación.
Aunque el diplomático estadounidense afirmó que "con algunos de estos individuos, llevará algún tiempo", no descarta la posibilidad de llevarlos a casa pese a que el régimen de Maduro los acusa de planear supuestos magnicidios.
Por otra parte, el enviado especial de Trump explicó que los seis ciudadanos liberados han sido interrogados y han dado sus testimonios de las condiciones de detención en las que permanecían.
"Estos individuos estaban completamente a oscuras", dijo.
Grenell explicó que solo cuatro de los estadounidenses tenían uniformes de prisioneros porque dos de ellos se negaron a seguir las órdenes de los cuerpos de seguridad tras asumir que se trataba de "otro engaño".
"Cuatro de ellos están en un uniforme azul de prisión y dos con un uniforme normal. Lo que sucedió fue que negociamos por seis, y los cuatro en azul, en realidad nos dijeron cuando entramos en el avión: '¿dónde están los otros dos? Éramos seis en esa habitación, nos dijeron que nos laváramos y preparáramos. Dos de los individuos dijeron no lo estamos haciendo de nuevo, lo hemos hecho cuatro o cinco veces'", contó.
Dio algunos detalles de los términos en que se llevó a cabo su conversación con Maduro y funcionarios del régimen.
"El presidente Maduro me dijo: ‘Te vamos a dar estos, y ahora estas son las cosas que queremos'", recordó. "Y le dije: ‘No, te estamos dando un gran regalo, y el gran regalo es que estoy aquí sentado contigo, tienes todo tipo de cámaras alrededor y vas a usar esto con fines propagandísticos’… El regalo era una conversación, la esperanza de un futuro diferente, y un diplomático estadounidense sentado allí", declaró.
El funcionario estadounidense además de dar detalles de la entrega de rehenes, reveló haber sentido nerviosismo en el momento de la transacción.
"Estuvimos en la pista de aterrizaje durante dos horas y media esperando y no sabía si nos iban a entregar a los individuos. Esperamos y esperamos, todos en el avión. Muy nerviosos. Yo estaba nervioso por lo que iba a pasar cuando llegaran esos autos", confesó.
"Vi que los seis estaban en autos individuales y pude ver desde el otro lado de la pista que alguien salió del auto y tenía una capucha negra sobre la cabeza. Y yo me quedé pensando: 'Este es un estadounidense. Soy un diplomático estadounidense. Tengo a la Fuerza Aérea detrás de mí en un avión de la Fuerza Aérea. Y no podemos quedarnos aquí parados mientras un estadounidense tiene una capucha en la cabeza y está esposado'. Así que caminé hacia allí y a cada individuo se le estaban quitando la capucha y los grilletes yo le decía a cada individuo, suban al avión, suban al avión. Soy un diplomático estadounidense. Suban al avión ahora mismo", relató.
Grenell itió que al abrazar a los liberados sintió "que la emoción me invadía como nunca antes" en sus 25 años de carrera diplomática. "Realmente tuve que contener las lágrimas", manifestó.
